eDreams, BARCELONA
“Nunca te pongas detrás de la gente mayor. Sus cuerpos están llenos de metal oculto y no parecen apreciar el poco tiempo que les queda en la Tierra. ¡Bingo! Asiáticos. Llevan poco equipaje, viajan de forma eficiente y les encantan los zapatos sin cordones“, dijo el encantador y cínico Ryan (George Clooney) sobre los controles de seguridad del aeropuerto en la película “Up in the Air”. Como Ryan, todas las personas que ha volado con cierta frecuencia tienen más de una anécdota que contar.
Vecinos de asiento que invaden tu espacio personal, gente que no sabe hablar sin gritar, niños revoltosos… estos son sólo algunos de los tipos de viajero que te puedes encontrar en un vuelo. Cuando se entra en un avión, es recomendable hacerlo armado de paciencia y de autocontrol. Si quieres evitar ser uno de estos molestos compañeros a bordo, aquí tienes algunas normas de comportamiento, ilustradas por el movimiento #PassengerShaming de Facebook, Instagram y Twitter.
1. La Cola
Relax, el avión no va a despegar hasta que todo el mundo esté a bordo, así que no hay necesidad de empujar como si fuera el primer día de rebajas. Hacer una cola es algo que se aprende en preescolar, ¿por qué es tan difícil hacerlo en un avión?

2. El pasillo
Cuando encuentres tu asiento, intenta poner la maleta justo arriba y sentarte lo más rápido posible. Cuando el avión esté en el aire tendrás tiempo de sobra para sacar los caramelos, el libro, las gafas…

3. El baño
Si eres de esos que va al baño de forma compulsiva o necesita estirar las piernas cada 3 minutos, escoge un asiento junto al pasillo. Si por desgracia te ha tocado un asiento de ventana o en medio y quieres salir justo cuando tu compañero se ha quedado dormido… ¡intenta hacerlo con cuidado! Nadie quiere despertarse con un desconocido arrastrándose sobre su regazo.

Y cuando finalmente llegues al baño, esperemos que no se parezca a esto…
4. El asiento
Si el asiento se reclina, asegúrate de que no molestas demasiado al pasajero de detrás. ¡No todo el mundo es contorsionista!
Mantén los pies en tu asiento. ¿Te has preguntado alguna vez por qué no hacen champú al aroma de pies?

Y sí, técnicamente es tu asiento, pero quizás el pasajero de atrás quiera mirar las revistas que hay en el bolsillo del asiento…

Si la película no es buena, no es tan mala idea…
5. Apoyabrazos
Si tienes el asiento central no hay mucho que hacer, pero según el código no escrito de los Derechos de los Pasajeros, cada persona merece al menos un apoyabrazos.

6. Niños
Los niños también tienen derecho a volar y algunas veces no son ellos los que más molestan…¿habrá sido idea del bebé dejar el pañal en el asiento de delante? Seguramente no.
7. Dormir
El los vuelos largos, es posible que surja este problema. Tú quieres dormir, pero tu compañero de asiento quiere leer y deja la luz encendida. Si no hay antifaces para dormir, siempre puedes usar el truco de la funda de almohada. Parecerás David el Gnomo, pero ¿y lo agustito que dormirás?

8. Comer y beber
No te dejes llevar por el “gratis” de “comida y bebida gratis” en el avión. Si no tienes control, puedes acabar como este personaje.
Dejar los asientos como si hubieras celebrado Nochevieja en el avión tampoco es una opción.
¿Te has encontrado con algunas de estas situaciones en el avión? ¿Qué experiencias embarazosas has vivido durante un vuelo? ¡Queremos saberlas todas!